¡Hola! Dentro del apartado de
trastornos alimenticios hoy lo vamos a dedicar a la obesidad.
La definición
estricta nos dice que la obesidad es una enfermedad tratable que se produce cuando
se acumula un exceso de grasa (tejido adiposo) en el cuerpo.
Algunos expertos
advierten que lo más negativo se produce cuando un agente actúa y agrava a
corto plazo y de forma muy evidente se manifiestan otras patologías graves como
diabetes, hipertensión, problemas de corazón…incluso algunos problemas de cáncer,
principalmente gastrointestinales.
Las personas
que superan en un 20% el punto medio de la escala de peso se consideran obesas,
hay que contar con la excepción de las personas que son muy musculosas. Según el
IMC.
La principal
causa es el consumo de alimentos con alto contenido en grasas y azúcares, y la disminución
o la deficiencia de la actividad física.
Las dietas tradicionales
han sido desplazadas por otras que tienen un alto contenido energético; esto quiere decir que se han añadido más alimentos de grasas animal, más azúcares
y se ha descendido el consumo en carbohidratos complejos y fibra. Si a esto le sumamos
que el hacer ejercicio también ha disminuido; el resultado es un balance de energía
muy positivo que no es consumido, y por lo tanto, se acumula y lo hace en forma
de grasa.
Esto en
rasgos principales es la obesidad, y hay que tener en cuenta que afecta a todo
el mundo; la OMS data que unas 300 millones de personas son obesas.
Bien ahora
esta enfermedad no es un problema que afecte solo a adultos sino que también lo
hace a niños y cada vez de una manera más acusada: obesidad infantil.
Los expertos
de hoy en día indican que no importa que el niño este gordito o este delgado
sino que lo que importa es que esté sano. Tanto en Europa como en EEUU, desde
los 90 la obesidad infantil se ha duplicado. España se ha convertido en el
segundo país con más obesidad infantil de la UE entre niños de 6-12 años. Es un dato alarmante ya que España cuenta
con una dieta mediterránea, y tan solo hace 15 años con esta dieta solo se
presentaba un 5% de niños obesos.
No hay una
cantidad fija de lo que deba comer un niño, porque cada niño es diferente en su
metabolismo y su corporalidad, si además le sumamos que cada uno tiene un gusto
diferente es imposible generalizar.
Lo adecuado
para evitar estos trastornos es llevar una dieta equilibrada y estructurada además
de acompañarla de ejercicio (ni deficiente, ni en exceso).
A continuación
hablaremos de cómo tratar este trastorno en 7 pasos:
- La
cantidad también es un factor importante, hay que moderar la cantidad de
alimento que se come. Se recomienda hacer comidas básicas al día y cada dos
horas comer una fruta, así se consigue que el estómago esté en constante
movimiento y se liberan los excesos energéticos.
- Llevar
a cabo un registro de los alimentos consumidos, en el que se indique la cantidad,
la situación, y la hora. Este registro será útil en la prevención
de en qué momentos se consume más.
- Actividad
física, se recomienda caminar 30 minutos diarios.
- Tratar
de evitar el sedentarismo, haciendo actividades fuera de casa.
- Se
debe intentar no pesarse muy seguido en la báscula, una vez por semana es
suficiente; para evitar que se provoque ansiedad.
- Consultar
con un profesional de la salud. Así podrás prevenir síntomas secundarios de la
obesidad.
- Acudir
a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de malestar.
Investigadores
realizaron un estudio y analizaron los datos de la tendencia al sobrepeso en
188 países. Los resultados fueron que estos son los 10 países con mayor
sobrepeso del mundo:
1. EEUU.
2. China.
3. India.
4. Rusia.
5. Brasil.
6. México.
7. Egipto.
8. Alemania.
9. Pakistán.
10. Indonesia.
10. Indonesia.
Según el estudio, la prevalencia de niños y adolescentes con
sobrepeso u obesidad aumentó casi el 50% respecto a 1980. En 2013, se
registraron que más del 22% y casi el 24% de niños de países desarrollados sufrían
de esta enfermedad.
Con esto nos
despedimos por hoy, esperamos que os sea de utilidad. J
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